De
la producción industrial, al rededor del 58% se destina a la
exportación. Las industrias más importantes son la de automoción,
electrónica, electricidad, informática, metalúrgica, materiales de
construcción, química (especialmente la farmacéutica) y de
alimentación y bebidas. La
presencia en el país de una importante inversión extranjera ha
servido para que muchas de estas industrias tengan un comportamiento
dinámico, en el que la inversión en actividades productivas y la
exportación son determinantes para el crecimiento económico del
conjunto del país. El equipamiento electrónico y óptico
representan la parte con más importancia de la producción.
Hungría
otorga tratamiento preferencial a las importaciones de los países en
desarrollo, excepto para carne y productos cárnicos, pescados,
productos lácteos, aluminio y derivados.
Actualmente,
cualquier empresa que quiera dedicarse al comercio, tanto interior
como exterior, es libre de hacerlo y el único requisito consiste en
la inscripción en el Registro Mercántil y, en caso del comercio
exterior, también en el registro del Banco Nacional de Hungría. Esta
simplicidad ha permitido el surgimiento de numerosas empresas
privadas que se dedican a la importación y distribución.
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